domingo, diciembre 31, 2006
la decisión de Cora
LA VIDA SECRETA DE LAS PALABRAS
Hay un hombre que se recupera de sus heridas (las del cuerpo; las del alma tardan en sanar), en una cama, de un camarote de una plataforma petrolera. Tiene quemaduras y no puede ver, por lo menos, por dos semanas. Una introvertida mujer (Hanna) lo viene a cuidar. Se adivina que ella tampoco ha podido sanar sus heridas del alma. Es sorda, tiene un audífono que apaga a voluntad, cuando quiere aislarse de los otros. Sólo come arroz, manzana y pollo. No sonríe. Y tiene cantidades industriales de panes de jabón blanco con los que se lava las manos (cada día, un pan nuevo).
No cuesta mucho entender que ambos (enfermera y enfermo) guardan un secreto que los atormenta y que esa interrelación de los dos personajes sacará a la luz esas miserias que han estado escondiendo, sin perdonarse.
“La vida secreta de las palabras” es una película árida, bastante lenta, de esa rara directora que es Isabel Coixet, española que filma en inglés, producida por los hermanos Almodóvar, de la que vimos la muy buena “Mi vida sin mí” (también con Sara Polley como protagonista). La historia avanza, muy lentamente, hasta la revelación de Hanna, la protagonista; a partir de allí levanta muchos puntos y empiezan a entenderse algunas pistas, dadas en el relato, como la voz en off con la que empieza la película.
“La vida secreta…” no es una película redonda, cae en algunos pecados de soberbia del cine arte. Su principal inconveniente está en los diálogos que no son todo lo brillantes que deberían ser, para sostener una película que se asienta, el 90%, en conversaciones entre dos personajes.
No obstante esas falencias, posee algunos momentos para guardar, en especial por esa muda tensión que proporciona Sara Polley, una actriz para anotar; Tim Robbins acompaña acertadamente, aunque está lejos de hacer su mejor papel. Anoten un punto para Javier Cámara (el enfermero de “Hable con ella”), en un rol a mitad de camino, y la belleza otoñal de Julie Christie.
Escenas: el almuerzo que Hanna comparte; la escena final, en la que se revela de quién es la voz en off que acompaña el relato; la revelación de Hanna a Josef; el almuerzo con otros hombres de la plataforma petrolera.
Frases: “Diez años después, ¿quién se acuerda de la guerra en los Balcanes? Los sobrevivientes. Sólo ellos lo recuerdan, con vergüenza. Con vergüenza de haber sobrevivido”; “No me gusta estar con los otros. Soy un solitario también”, “Somos muchos”; “Temo que un día, puede no ser hoy, puede ser, no puede ser mañana, pero un día, de pronto, empiece a llorar y llore tanto que nada ni nadie pueda parar mis lágrimas y termine inundando el cuarto y no sea capaz de respirar y te lleve conmigo y ambos nos ahoguemos”, “Te prometo que aprenderé a nadar, Hanna”; “Uno sigue viviendo, de cualquier modo, sigue adelante. Hay otros que no lo logran jamás”.
CONSEJO: esperar al video.
sábado, diciembre 30, 2006
frases de "Niños del hombre"
El mundo está conmovido por la muerte de Diego Ricardo, la persona más joven del planeta con 18 años, 4 meses, 20 días, 16 horas y 8 minutos.
No puedo verdaderamente recordar cuando fue la última vez que tenía esperanzas y ciertamente no puedo recordar cuando alguien la tuvo. Porque, desde que las mujeres dejaron de tener niños, ¿quién puede tener esperanzas?
El Mundo Ha Colapsado. Sólo Gran Bretaña Continúa Adelante.
-Prueba ésta. Tose.
-¿Toser?
-Tose.
-Es híbrida con fresa. Se llama "Tos de fresa".
El mundo se ha ido a la mierda. ¿Sabes qué? Ya era demasiado tarde incluso antes de la infertilidad.
¿Ese pitido que tienes en los oídos? Ese biip. Es el sonido de las células de tus oídos muriendo, su canción final. Una vez que empieza, nunca volverá a estar normal. Disfrútalo mientras dure.
Se me hace difícil mirarte. Él tenía tus ojos.
-Debiste verlo en los viejos tiempos, era un activista social de verdad.
-No era buen activista, solo quería sexo.
-Está embarazada.
-Ya sabes lo que arriesgamos.
-¡Está embarazada!
-Lo sé. La única del mundo.
-¿Es científico o doctor?
-Es un hippie.
-Sí, Julien y Theo se conocieron entre millones de protestantes en una manifestación, por casualidad. Pero estaban ahí por las cosas en que creían. En primer lugar, querían cambiar el mundo. Y su fe los mantuvo juntos. Así que por casualidad, nació Dylan. Éste es él. Era eso, una oportunidad mágica. Precioso. La fe puesta en práctica. Por pura casualidad. Era un dulce sueño. Bellas manos, bellas piernecitas. Piecitos pequeños. En el 2008 llegó la gripe. Y por casualidad, él murió.
-¡Jesús!
-Verás, Theo perdió la fe, y perdió la posibilidad. Así que... ¿Para qué molestarse? Si la suerte nos usa a todos.
-Y recuerda, dile a Syd que es un maldito fascista.
-La pintura del parque de juegos está desteñida, pero está ahí. El mundo no recuerda sus voces. Estuve ahí en el final.
-Y ahora estarás en el comienzo.
Solo quería protegerlo. ¡Y empezó a llorar! Nunca pensé que sonaría tan bello. Es tan pequeño. Nos dicen que seamos pacíficos. ¡No tengo tiempo de ser pacífico si me quieren quitar mi dignidad!
-¿Quién es el padre?
-No hay padre. Soy virgen… ¡Naaa! Pero sería bueno, ¿no?
Tu bebé es el milagro que el mundo estuvo esperando.
Es muy raro, lo que sucede en el mundo sin las voces de los niños.
No puedo verdaderamente recordar cuando fue la última vez que tenía esperanzas y ciertamente no puedo recordar cuando alguien la tuvo. Porque, desde que las mujeres dejaron de tener niños, ¿quién puede tener esperanzas?
El Mundo Ha Colapsado. Sólo Gran Bretaña Continúa Adelante.
-Prueba ésta. Tose.
-¿Toser?
-Tose.
-Es híbrida con fresa. Se llama "Tos de fresa".
El mundo se ha ido a la mierda. ¿Sabes qué? Ya era demasiado tarde incluso antes de la infertilidad.
¿Ese pitido que tienes en los oídos? Ese biip. Es el sonido de las células de tus oídos muriendo, su canción final. Una vez que empieza, nunca volverá a estar normal. Disfrútalo mientras dure.
Se me hace difícil mirarte. Él tenía tus ojos.
-Debiste verlo en los viejos tiempos, era un activista social de verdad.
-No era buen activista, solo quería sexo.
-Está embarazada.
-Ya sabes lo que arriesgamos.
-¡Está embarazada!
-Lo sé. La única del mundo.
-¿Es científico o doctor?
-Es un hippie.
-Sí, Julien y Theo se conocieron entre millones de protestantes en una manifestación, por casualidad. Pero estaban ahí por las cosas en que creían. En primer lugar, querían cambiar el mundo. Y su fe los mantuvo juntos. Así que por casualidad, nació Dylan. Éste es él. Era eso, una oportunidad mágica. Precioso. La fe puesta en práctica. Por pura casualidad. Era un dulce sueño. Bellas manos, bellas piernecitas. Piecitos pequeños. En el 2008 llegó la gripe. Y por casualidad, él murió.
-¡Jesús!
-Verás, Theo perdió la fe, y perdió la posibilidad. Así que... ¿Para qué molestarse? Si la suerte nos usa a todos.
-Y recuerda, dile a Syd que es un maldito fascista.
-La pintura del parque de juegos está desteñida, pero está ahí. El mundo no recuerda sus voces. Estuve ahí en el final.
-Y ahora estarás en el comienzo.
Solo quería protegerlo. ¡Y empezó a llorar! Nunca pensé que sonaría tan bello. Es tan pequeño. Nos dicen que seamos pacíficos. ¡No tengo tiempo de ser pacífico si me quieren quitar mi dignidad!
-¿Quién es el padre?
-No hay padre. Soy virgen… ¡Naaa! Pero sería bueno, ¿no?
Tu bebé es el milagro que el mundo estuvo esperando.
Es muy raro, lo que sucede en el mundo sin las voces de los niños.
viernes, diciembre 29, 2006
que se vengan los chicos
NIÑOS DEL HOMBRE
Una idea fuerte, un muy buen elenco y una sólida concepción estética. Los tres pilares en que se apoya “Niños del hombre”, una gran historia muy bien pero muy bien contada, con hallazgos estéticos que destacan a su director, el mexicano Alfonso Cuarón.
La idea la proporciona una novela de P. D. James. Las mujeres se han vuelto estériles. No se registran nacimientos en casi veinte años. ¿Qué podría pasar en un mundo sin niños? Estire esta idea y tendrá una muy buena historia de ciencia ficción. El mundo de “Niños del hombre” es un mundo sin esperanzas. Y cuando no hay esperanzas, todos se vuelven unos contra otros.
La idea es notable. La conciencia de la extinción de una especie, los últimos días de una sociedad que sabe que desparecerá de la historia. Poética sociología de la fugacidad.
En ese mundo, sólo Gran Bretaña resiste, con un régimen autoritario que caza a los inmigrantes ilegales en jaulas y los deporta. El mismo gobierno que provee de dosis letales para suicidarse a elección. Reminiscencias nazis, la indiferencia de la población es paralela a su desánimo. El derrumbe moral se proyecta en un derrumbe ecológico y urbano: basuras en las calles, polución, suciedad, violencia urbana.
En ese contexto, Theo, el protagonista, un ex activista político, hoy nihilista, se encuentra con la que fue el amor de su vida, quien le pide un favor: trasladar a una chica, de un punto a otro de la isla. Lejos está de sospechar Theo la trascendencia que encierra ese pedido: la chica está embarazada.
El viaje de Theo es la no disimulada recreación de aquel otro nacimiento que dio esperanzas a la humanidad. El mundo de Theo no está muy lejos de nuestro mundo. Y, como esa sociedad en colapso, necesitamos redescubrir la magia del milagro cotidiano. El nacimiento de un niño puede cambiar el mundo.
La trama de “Niños de hombre” está calculada al milímetro, sin decaer en ningún momento. Y cuenta con una dirección soberbia. Es exquisito el modo que Alfonso Cuarón mueve la cámara, en una estética de corresponsal de guerra, muy a tono con el clima exasperante de la historia. Los plano-secuencias son de manual, notables, un ejemplo para disfrutar. Así se cuenta una historia.
Del elenco (parejo en todo nivel), destacamos al protagonista, Clive Owen y al genial Michael Caine en un personaje memorable, un hippie lisérgico, venido a menos, de gran importancia en la historia. Una perla: Diego Ricardo, el pibe más joven del mundo que muere al empezar la película, ¡es argentino! (lo es también el actor que lo interpreta, Juan Gabriel Yacuzzi, un “Chiquititas”, “Montaña rusa”, etc.).
Para destacar la fotografía de Emmanuel Lubezki y los rubros de dirección de arte y edición.
Escenas destacadas: la explosión de la bomba en la calle; la escena en la que la visión de la niña detiene la guerra; la caminata por el patio de juegos de una escuela abandonada; la escena de la emboscada en el auto.
Las frases, mañana.
CONSEJO: ir a verla.
martes, diciembre 26, 2006
frases de "Casino Royale"
Cualquier matón puede matar. Necesito que dejes tu ego fuera de la ecuación.
-¿No te molesta asesinar a toda esa gente?
-No sería bueno en mi trabajo, si sucediera.
Y yo necesito que luzcas como un hombre en esa mesa.
Yo sé donde guardas tu arma.
-No te preocupes, no eres mi tipo.
-¿Inteligente?
-Soltera.
-Mantendré mis ojos en el dinero y fuera de tu perfecto formado trasero.
-Lo notaste…
-Sí, los contadores tienen imaginación
A ellos no les interesa lo que hacemos mientras no nos fotografíen haciéndolo.
-¿Me amas?
-Lo suficiente para viajar por el mundo contigo hasta que uno de nosotros necesite conseguir un trabajo honesto... que creo que te tocará a ti, porque no tengo idea de lo que es un trabajo honesto…
Lo siento, pero no lo siento.
-Ha cambiado su camisa, Mr. Bond. Espero que nuestro pequeño juego no lo haga sudar.
¡Ahora todo el mundo sabrá que me mató rascándome las bolas!
-Creí que M era una letra elegida al azar, no sabía que significaba...
-Una sílaba más y eres hombre muerto.
-Si sólo quedara de ti, tu sonrisa y tu meñique, aún serías más hombre que cualquiera que conocí.
-Eso es porque sabes lo que puedo hacer con mi meñique.
-Martini Seco
-Sí, Señor
-Espere... Tres medidas de Gordon, uno de vodka, medio de Kina Lillet. Agitelo con hielo y agréguele un delgada rebanada de limón sin cáscara.
-Me temo que no soy tan cruel.
-Quizás haya perdido la práctica.
La perra está muerta.
El nombre es Bond. James Bond.
En los viejos tiempo, un agente que hubiera hecho tal bochorno, hubiera tenido el buen sentido de desertar. ¡Cristo, extraño la Guerra Fría!
-Su archivo no muestra ninguna muerte, pero para convertirse en un doble 0, exige…
-(DISPARANDO) Dos…
Es sorprendente lo que puede hacer Photoshop en estos días…
-¿Cree en Dios, Le Chiffre?
- No. Creo en una tasa de retorno razonable.
-Tantos hombres agradables... ¿Por qué no pueden ser como tú?
-Porque serían malos.
-¿Más conjeturas, Sr. Bond?
-¿Sobre usted señorita Lynd? Que su belleza es un problema. Le preocupa que no la tomen en serio.
-Como cualquier mujer atractiva con algo de cerebro.
-Cierto, pero lo compensa llevando ropa ligeramente masculina y siendo más agresiva que sus colegas femeninas. Lo que le da un aire un tanto irritable y paradójicamente, hace menos probable que sus superiores masculinos la acepten y la asciendan, ya que éstos interpretan su inseguridad como una señal de arrogancia. Yo habría apostado por lo de hija única pero... al ignorar el comentario de lo de sus padres me inclino más por huérfana
-De acuerdo... por el corte de su traje fue a Oxford o algo parecido, y de hecho cree que los humanos visten así. Pero usted lo lleva con gran desdén... Diría que no viene de una familia adinerada y que sus compañeros no dejaron de recordárselo. O sea que fue a la Universidad gracias a la caridad y de ahí ese resentimiento. Y ya que lo primero que le sugerí fue lo de huérfana, lo mismo diría de usted. Lo ve... esto del poker me gusta... y tiene muchísimo sentido... El Servicio busca jóvenes inadaptados que no les importe sacrificar a otros con el fin de proteger a la Reina y al país. Ya sabe, ex agentes de los Servicios Secretos de sonrisa fácil y relojes caros. ¿Es un Rolex?
-Omega.
-Es bello.
Odio decirlo pero parece que son los contables los que llevan el MI6 hoy en día.
-¿No te molesta asesinar a toda esa gente?
-No sería bueno en mi trabajo, si sucediera.
Y yo necesito que luzcas como un hombre en esa mesa.
Yo sé donde guardas tu arma.
-No te preocupes, no eres mi tipo.
-¿Inteligente?
-Soltera.
-Mantendré mis ojos en el dinero y fuera de tu perfecto formado trasero.
-Lo notaste…
-Sí, los contadores tienen imaginación
A ellos no les interesa lo que hacemos mientras no nos fotografíen haciéndolo.
-¿Me amas?
-Lo suficiente para viajar por el mundo contigo hasta que uno de nosotros necesite conseguir un trabajo honesto... que creo que te tocará a ti, porque no tengo idea de lo que es un trabajo honesto…
Lo siento, pero no lo siento.
-Ha cambiado su camisa, Mr. Bond. Espero que nuestro pequeño juego no lo haga sudar.
¡Ahora todo el mundo sabrá que me mató rascándome las bolas!
-Creí que M era una letra elegida al azar, no sabía que significaba...
-Una sílaba más y eres hombre muerto.
-Si sólo quedara de ti, tu sonrisa y tu meñique, aún serías más hombre que cualquiera que conocí.
-Eso es porque sabes lo que puedo hacer con mi meñique.
-Martini Seco
-Sí, Señor
-Espere... Tres medidas de Gordon, uno de vodka, medio de Kina Lillet. Agitelo con hielo y agréguele un delgada rebanada de limón sin cáscara.
-Me temo que no soy tan cruel.
-Quizás haya perdido la práctica.
La perra está muerta.
El nombre es Bond. James Bond.
En los viejos tiempo, un agente que hubiera hecho tal bochorno, hubiera tenido el buen sentido de desertar. ¡Cristo, extraño la Guerra Fría!
-Su archivo no muestra ninguna muerte, pero para convertirse en un doble 0, exige…
-(DISPARANDO) Dos…
Es sorprendente lo que puede hacer Photoshop en estos días…
-¿Cree en Dios, Le Chiffre?
- No. Creo en una tasa de retorno razonable.
-Tantos hombres agradables... ¿Por qué no pueden ser como tú?
-Porque serían malos.
-¿Más conjeturas, Sr. Bond?
-¿Sobre usted señorita Lynd? Que su belleza es un problema. Le preocupa que no la tomen en serio.
-Como cualquier mujer atractiva con algo de cerebro.
-Cierto, pero lo compensa llevando ropa ligeramente masculina y siendo más agresiva que sus colegas femeninas. Lo que le da un aire un tanto irritable y paradójicamente, hace menos probable que sus superiores masculinos la acepten y la asciendan, ya que éstos interpretan su inseguridad como una señal de arrogancia. Yo habría apostado por lo de hija única pero... al ignorar el comentario de lo de sus padres me inclino más por huérfana
-De acuerdo... por el corte de su traje fue a Oxford o algo parecido, y de hecho cree que los humanos visten así. Pero usted lo lleva con gran desdén... Diría que no viene de una familia adinerada y que sus compañeros no dejaron de recordárselo. O sea que fue a la Universidad gracias a la caridad y de ahí ese resentimiento. Y ya que lo primero que le sugerí fue lo de huérfana, lo mismo diría de usted. Lo ve... esto del poker me gusta... y tiene muchísimo sentido... El Servicio busca jóvenes inadaptados que no les importe sacrificar a otros con el fin de proteger a la Reina y al país. Ya sabe, ex agentes de los Servicios Secretos de sonrisa fácil y relojes caros. ¿Es un Rolex?
-Omega.
-Es bello.
Odio decirlo pero parece que son los contables los que llevan el MI6 hoy en día.
lunes, diciembre 25, 2006
el retorno de la leyenda
CASINO ROYALE
Reconozcámoslo. Cuando anunciaron el nombre de Daniel Craig como el futuro 007, no dábamos dos mangos por el tipo. Y como Abondanzieri en el Mundial, nos tapó la boca. El tipo sigue la línea del, tal vez, mejor James Bond, el inimitable Sean Connery. Crease o no, es lo más fuerte de este nuevo capítulo, que puede ser un punto de inflexión en la saga del agente 007.
Esta versión de “Casino Royale” (la anterior era una intragable sátira con nombres como Peter Sellers, David Niven, Woody Allen o Ursula Andress) tiene dos partes bien diferenciadas. La primera mitad, hasta que empiezan los juegos en el Casino, es una muy pero muy buena historia de acción, rayando a gran altura. En este primer segmento, Craig se impone como un 007 memorable, con algunas escenas de acción notables, como la persecución en la obra en construcción, que es de antología.
La segunda mitad, justo cuando se empieza a contar la historia principal, la del juego de poker con Le Chiffre, se vuelve tan convencional que anula todo lo bueno hecho antes. Hay tantos deus ex machina (paradigmático, tener un desfibrilador en el auto; ¡eeeeh! ¡muuuuchooooo!) que afean lo que, hasta entonces, venía muy pero muy bien.
Una lástima, porque “Casino Royale” había encontrado un gran casting (Daniel Craig, la deliciosa Eva Green y el malvadísimo Mads Mikkelsen) que queda a mitad de camino por no hallar un guión al mismo nivel.
En suma: lo que deja esta “Casino Royale” es lo que promete Daniel Craig como un 007 de largo plazo. Tal vez si los Broccoli se tomaran un tiempo en buscar un buen guión, tendrían un clásico entre manos. Vamos a ver, lo que traen las nuevas aventuras del agente más conocido del cine moderno.
Escenas destacadas: la secuencia inicial, saltando por los distintos niveles de una obra en construcción; la tortura en la silla; el encuentro entre Bond y Vesper Lynd; la escena del abrazo de Bond a Vesper bajo la ducha; el cruce entre M (¡qué gran actriz que es Judi Dench!) y James Bond.
Las mejores frases para un post especial de mañana.
CONSEJO: ir a verla.
sábado, diciembre 23, 2006
frases de "El gran truco"
Cada gran truco de magia consiste en tres actos. El primer acto se llama “El compromiso”. El mago muestra algo ordinario, pero por supuesto… probablemente no lo es. El segundo acto se llama “El giro”. El mago hace que alguna cosa ordinaria se vuelva extraordinaria. Ahora, si buscas el secreto… no lo encontraras, porque en realidad no quieres conocerlo. Quieres ser engañado. El tercer acto llamado “El Prestigio”, es la parte de giros y vueltas, donde las vidas se suspenden en equilibrio, y asistes a algo tan impresionante jamás visto.
-Nunca pensé buscar una respuesta al final de un vaso.
-¿No has parado de buscar, no?
Sólo ve… como lucen sus caras
Ese es el truco. Él vive su acto.
Los secretos son mi vida.
-¿Qué nudo hiciste?
-No lo sé.
El hombre robó mi vida y yo robaré su truco.
-Es un horrible mago.
-No, es un gran mago. Él es un horrible showman.
La obsesión es el juego de los jóvenes.
A nadie le importa el hombre en la caja, el hombre que desaparece.
-¿Me amas?
-No hoy.
Las cosas no siempre salen como han sido planeadas, Mr. Angier. Es la belleza de la ciencia.
-Pensé que habías dicho que tenía que ensuciarme las manos.
-Probablemente, algún día… Sólo necesitaba saber si podías.
-¿Sus últimas palabras?
-Abracadabra.
-¿Ha considerado el costo de tal máquina?
-El precio no es un impedimento.
-Sí. Pero… ¿ha considerado el costo?
-Nunca pensé buscar una respuesta al final de un vaso.
-¿No has parado de buscar, no?
Sólo ve… como lucen sus caras
Ese es el truco. Él vive su acto.
Los secretos son mi vida.
-¿Qué nudo hiciste?
-No lo sé.
El hombre robó mi vida y yo robaré su truco.
-Es un horrible mago.
-No, es un gran mago. Él es un horrible showman.
La obsesión es el juego de los jóvenes.
A nadie le importa el hombre en la caja, el hombre que desaparece.
-¿Me amas?
-No hoy.
Las cosas no siempre salen como han sido planeadas, Mr. Angier. Es la belleza de la ciencia.
-Pensé que habías dicho que tenía que ensuciarme las manos.
-Probablemente, algún día… Sólo necesitaba saber si podías.
-¿Sus últimas palabras?
-Abracadabra.
-¿Ha considerado el costo de tal máquina?
-El precio no es un impedimento.
-Sí. Pero… ¿ha considerado el costo?
viernes, diciembre 22, 2006
nada por aquí, nada por allá
EL GRAN TRUCO
Juegos de espejos y duplicaciones. Nada es lo que parece. Ni sobre el escenario, ni en la pantalla. Para algunos, “El gran truco” puede ser una película sobre magos que pelean. En realidad, es una gran metáfora sobre el cine y el arte, la necesidad del artista de atrapar la atención del público, inmolándose en el juego. La gran mentira de todo arte, mentira genial, tan genial que el verdadero artista termina creyéndose las posibilidades fantásticas irrealizables. Juego de espejos, a esa gran mentira del arte, le corresponde aquella otra de igual tenor, el amor. Nunca amamos a la misma persona; nunca sabemos si el amor no es otro acto de ilusionismo para atrapar nuestra atención.
Si no vieron “El gran truco”, anoten estas reflexiones y vuelvan a leerlas, sólo después que salieron del cine. Porque avanzar más allá, revelaría el truco, el enigma final, pecado que no tendría perdón en un guión tan interesante, como éste de Jonathan y Christopher Nolan, adaptando la novela de Christopher Priest. La estructura del guión refleja ese juego de cajas chinas, una serie de flashbacks dentro de un flashback, ese doble juego del tipo que lee el diario de alguien que cita el diario de aquel que lee. Como en “Memento” (esa gran película de Nolan), remontar la flecha del tiempo cambia el sentido de lo visto. La primera escena no puede ser comprendida en su plenitud, hasta ver la cadena de eventos que la antecede. Ese significado original, cambia totalmente, al transcurrir la historia.
“El gran truco” es uno de los mejores guiones de este año y una gran película. Si no ha logrado dar el batacazo, imponerse sobre el resto, en gran parte se debe a la frialdad de Cristian Bale que, lamentablemente, se ha transformado en el actor fetiche de Christopher Nolan (recordar “Batman inicia”). El contraste con Hugh Jackman y Michael Caine es sumamente fuerte. Quien pasa casi desapercibida, sin su seducción natural, es Scarlett Johansson. Una mención para Tesla (el único personaje “histórico”), interpretado por David Bowie.
Para destacar la fotografía de Wally Pfister y la dirección de arte de Kevin Kavanaugh.
Escenas destacadas: la inicial; la presentación de Tesla, entre centellas eléctricas; la secuencia final. Las frases destacadas, mañana.
CONSEJO: ir a verla.
martes, diciembre 19, 2006
nuevo cine islandés
NOI, EL ALBINO
Si no viéramos los hielos de la congelada Islandia y los protagonistas no hablaran en islandés, uno pondría las manos en el fuego seguro de que “Noi, el albino” es otra de esas películas del nuevo cine nacional subsidiado. No. Nada de eso. Pero ese es el tono. Hasta con críticas ampliamente favorables de los iluminados locales de siempre.
Adolescente crecido en un pueblito gris que no puede superar la mediocridad de todos los días y las perspectivas de un futuro sin futuro. Con la mano en el corazón: este tema ya me tiene podrido. La película es del año 2003, el director es Dagur Kári, islandés residente en Dinamarca, autor del guión, además. Afortunadamente, Kári consigue meterle algunos gags, un poco de humor, para matizar la materialización de la nada que intenta representar la vida de Noi, tan brillante como incomprendido. Pero, por largos momentos, el filme sobrenada en baches de rutina. Sé que para algunos es un rasgo de genialidad, pero cuesta encontrarle sentido a esa presunción.
Hay que ponerle algunos porotos a la música y a la fotografía. No mucho más.
Escenas: la secuencia del alud; el regalo de cumpleaños de la abuela; el gag del padre que destroza el piano; el primer encuentro entre Noi e Iris; el gag del profesor enseñando a hacer mayonesa. Frases: “No hay música en este jodido piano”; “¿Qué es lo que esperas sacar por entregar esto?”, “¿Cero?”, “No. Tienes medio punto por escribir tu nombre”, “¿Sí? Es más que lo que esperaba sacar”; “Te enseñaré un truco que nunca falla: dile que está muy gorda, que tiene que ponerse en peso. Te prometo, no te dejará hasta que te acuestes con ella”; “¿Realmente estoy siendo aburrido?”, “No. Sólo borracho”.
CONSEJO: dejar pasar. Masocas del cine arte, anótenla.
viernes, diciembre 15, 2006
frases de “sin destino”
“Hoy no fui a la escuela. Le pedí a mi maestro que me dejara ir a casa. Le di la carta de mi padre, en la que me excusa por razones familiares. Él me preguntó cuál era la razón. Le dije que mi padre había sido convocado a los campos de labor”.
-Ellos están usando a los judíos de Budapest para negociar con los Aliados.
-¿Y las ejecuciones en masa en Polonia?
-¡Es diferente! Polonia no es Hungría.
-Tu padre parte mañana
-Lo sé.
-Estoy seguro que también sabes que tus despreocupados días de la infancia terminaron. Tú también eres parte del destino común de los judíos, ahora. ¿Sabes lo que eso significa?
Estaba preocupado por no entender lo que le decía a Dios. Creo que mezclé un poco las palabras. Pero al final del rezo, sentí que habíamos logrado hacer algo por papá.
-Bien, ellos pueden odiarme, pero no pienso que me odian a mí. No especialmente, sino en general.
-¿Odian en general?
-Sí, en general. No a ti… no a mí sino… la idea de un judío.
-Porque yo no sé realmente lo que es…
-¿Lo que es qué?
-Ser judío.
-¡Todos saben lo que es!
-Es una religión. Pero estoy interesada en lo que significa. Todos saben que es. Es una diferencia que nos separa de otras personas. Como si uno decidiera ser diferente y no una cosa que traes. No traigo la diferencia aquí, está dentro mío. Pero no sé si tengo que enorgullecerme o avergonzarme.
-No debería ser ni una cosa ni la otra.
-Entonces, ¿cuál es el punto de usar esta estrella amarilla?
-No hay punto. Ninguno.
Sólo cuando empecé a reconocer el riesgo de mi apuesta, comencé a disfrutar el juego. Estaba empezando a entender el simple secreto de mi universo: podía morir en cualquier lugar, en cualquier momento.
-Los alemanes son una raza culta.
-Los campos en Polonia son cultura, supongo…
-No esparza rumores…
¡Gente! Acaban de alcanzar la frontera húngara. Será la última vez que escucharán hablar en húngaro. Les hablo de hombre a hombre. Si alguno tiene dinero, algo de valor o cualquier otra cosa, dénmelo ahora. No necesitarán nada valioso adonde van. Los alemanes les sacarán todo lo que escondan. Seguramente preferirán dejar sus cosas en manos húngaras. Somos húngaros, después de todo.
-¿Puedes ver algo?
-Una estación. Creo.
-¿Algún nombre?
-Sí. A-usch-witz-Bir-ke-nau...
-¿Alguien saben dónde es?
-¿Qué es lo que dijiste?
-Auschwitz-Birkenau.
-Nunca escuché de ese lugar.
Me di cuenta de inmediato que era más chico, más pobre, podría decirse un campo de concentración provincial. Las duchas y los crematorios sólo eran para los campos importantes.
Un buen lavado es fundamental. En nieve, escarcha, siempre. Si no tendrás costras. Siempre debes tener un pedazo de pan en tu bolsillo. ¿De dónde? De la ración del día previo. Por supuesto, no es suficiente, como la ración. El desayuno, no lo dejes pasar. Un pedazo, no más. Para tu autoestima. ¿Sabes lo que es la autoestima? Es más importante que el pan y la sopa. ¿Quieres volver a casa? ¿Caminar otra vez por las calles de Budapest? Sin autoestima, no lo lograrás.
Siento ahora, por primera vez, el significado de la palabra victoria.
Eres libre. Estás vivo. Trata de ser feliz con vida y triunfo.
-¿Busca a alguien?
-Sí.
-¿Quién?
-Bandi Citrom.
-No está en casa. No está por el momento... no del todo… ¿Quién lo busca?
-¿Quién es?
-¿Dónde está…?
-Está buscando a Bandi Citrom.
-Él no está en casa. Vuelva más tarde. En unos días. Quizás...
-¿Qué se sienta ahora que vuelves a casa, al barrio que dejaste?
-Odio.
-Los campos no son el infierno.
-¿Qué son entonces? Sólo puedo imaginarlo como el infierno.
-No puedo imaginar el infierno.
-No puedo ver cuál es la diferencia…
-El infierno no existe; pero los campos, sí.
-Morí una vez.
-¿Qué es lo que dices?
-No puedo estar enojado nunca más.
Cobré fuerzas y me detuve, por un minuto, en la plaza. Era esa cierta hora, ahora, aquí, la había reconocido. Mi hora favorita en el campo. Estaba lleno de un agudo, doloroso e indefenso sentimiento; me sentía nostálgico… Sí, en cierto sentido, la vida era más limpia y simple. Aquellos que me salvaron, regresaron a mí. Por primera vez pensé en ellos con un dulce resentimiento, una especie de cariñoso rencor, pero no exageremos. Acepto los pro de estar vivo. Miro alrededor la amable plaza oscura, los remolinos en la calle que, pese a todos, mantienen tanta promesa. Siento que una buena predisposición crece en mí: debería continuar esta incontinuable vida. Recuerdo mi madre y sus planes de convertirme en ingeniero o doctor. Y sé que sucederá. No hay nada tan inimaginable que no se pueda soportar. Y dentro mío sé que me acecha, como una trampa inevitable, la felicidad. Aún junto a las chimeneas, en la pausa entre los tormentos, había algo parecido a la felicidad. La gente sólo pregunta sobre los horrores, aunque debería hablarles de la felicidad en los campos, la próxima vez… si preguntan. Y si no lo hacen. Y si no lo me olvido.
-Ellos están usando a los judíos de Budapest para negociar con los Aliados.
-¿Y las ejecuciones en masa en Polonia?
-¡Es diferente! Polonia no es Hungría.
-Tu padre parte mañana
-Lo sé.
-Estoy seguro que también sabes que tus despreocupados días de la infancia terminaron. Tú también eres parte del destino común de los judíos, ahora. ¿Sabes lo que eso significa?
Estaba preocupado por no entender lo que le decía a Dios. Creo que mezclé un poco las palabras. Pero al final del rezo, sentí que habíamos logrado hacer algo por papá.
-Bien, ellos pueden odiarme, pero no pienso que me odian a mí. No especialmente, sino en general.
-¿Odian en general?
-Sí, en general. No a ti… no a mí sino… la idea de un judío.
-Porque yo no sé realmente lo que es…
-¿Lo que es qué?
-Ser judío.
-¡Todos saben lo que es!
-Es una religión. Pero estoy interesada en lo que significa. Todos saben que es. Es una diferencia que nos separa de otras personas. Como si uno decidiera ser diferente y no una cosa que traes. No traigo la diferencia aquí, está dentro mío. Pero no sé si tengo que enorgullecerme o avergonzarme.
-No debería ser ni una cosa ni la otra.
-Entonces, ¿cuál es el punto de usar esta estrella amarilla?
-No hay punto. Ninguno.
Sólo cuando empecé a reconocer el riesgo de mi apuesta, comencé a disfrutar el juego. Estaba empezando a entender el simple secreto de mi universo: podía morir en cualquier lugar, en cualquier momento.
-Los alemanes son una raza culta.
-Los campos en Polonia son cultura, supongo…
-No esparza rumores…
¡Gente! Acaban de alcanzar la frontera húngara. Será la última vez que escucharán hablar en húngaro. Les hablo de hombre a hombre. Si alguno tiene dinero, algo de valor o cualquier otra cosa, dénmelo ahora. No necesitarán nada valioso adonde van. Los alemanes les sacarán todo lo que escondan. Seguramente preferirán dejar sus cosas en manos húngaras. Somos húngaros, después de todo.
-¿Puedes ver algo?
-Una estación. Creo.
-¿Algún nombre?
-Sí. A-usch-witz-Bir-ke-nau...
-¿Alguien saben dónde es?
-¿Qué es lo que dijiste?
-Auschwitz-Birkenau.
-Nunca escuché de ese lugar.
Me di cuenta de inmediato que era más chico, más pobre, podría decirse un campo de concentración provincial. Las duchas y los crematorios sólo eran para los campos importantes.
Un buen lavado es fundamental. En nieve, escarcha, siempre. Si no tendrás costras. Siempre debes tener un pedazo de pan en tu bolsillo. ¿De dónde? De la ración del día previo. Por supuesto, no es suficiente, como la ración. El desayuno, no lo dejes pasar. Un pedazo, no más. Para tu autoestima. ¿Sabes lo que es la autoestima? Es más importante que el pan y la sopa. ¿Quieres volver a casa? ¿Caminar otra vez por las calles de Budapest? Sin autoestima, no lo lograrás.
Siento ahora, por primera vez, el significado de la palabra victoria.
Eres libre. Estás vivo. Trata de ser feliz con vida y triunfo.
-¿Busca a alguien?
-Sí.
-¿Quién?
-Bandi Citrom.
-No está en casa. No está por el momento... no del todo… ¿Quién lo busca?
-¿Quién es?
-¿Dónde está…?
-Está buscando a Bandi Citrom.
-Él no está en casa. Vuelva más tarde. En unos días. Quizás...
-¿Qué se sienta ahora que vuelves a casa, al barrio que dejaste?
-Odio.
-Los campos no son el infierno.
-¿Qué son entonces? Sólo puedo imaginarlo como el infierno.
-No puedo imaginar el infierno.
-No puedo ver cuál es la diferencia…
-El infierno no existe; pero los campos, sí.
-Morí una vez.
-¿Qué es lo que dices?
-No puedo estar enojado nunca más.
Cobré fuerzas y me detuve, por un minuto, en la plaza. Era esa cierta hora, ahora, aquí, la había reconocido. Mi hora favorita en el campo. Estaba lleno de un agudo, doloroso e indefenso sentimiento; me sentía nostálgico… Sí, en cierto sentido, la vida era más limpia y simple. Aquellos que me salvaron, regresaron a mí. Por primera vez pensé en ellos con un dulce resentimiento, una especie de cariñoso rencor, pero no exageremos. Acepto los pro de estar vivo. Miro alrededor la amable plaza oscura, los remolinos en la calle que, pese a todos, mantienen tanta promesa. Siento que una buena predisposición crece en mí: debería continuar esta incontinuable vida. Recuerdo mi madre y sus planes de convertirme en ingeniero o doctor. Y sé que sucederá. No hay nada tan inimaginable que no se pueda soportar. Y dentro mío sé que me acecha, como una trampa inevitable, la felicidad. Aún junto a las chimeneas, en la pausa entre los tormentos, había algo parecido a la felicidad. La gente sólo pregunta sobre los horrores, aunque debería hablarles de la felicidad en los campos, la próxima vez… si preguntan. Y si no lo hacen. Y si no lo me olvido.
jueves, diciembre 14, 2006
la felicidad entre las sombras
SIN DESTINO
El nombre del húngaro Lajos Koltai ya era conocido por ser uno de los destacados directores de fotografía del cine actual (recuerden “Conociendo a Julia”, “Malena” o “Sunshine”). “Sin destino” es su primera película como director, debutando con una novela del Nobel húngaro Imre Kertész (guionista del filme). Alrededor de medio millón de judíos húngaros murieron en el Holocausto y, hasta el día de hoy, la sociedad húngara trata de esquivarle el bulto a la colaboración de su gobierno con las deportaciones masivas a los campos de la muerte nazi. “Sin destino” es la historia de un adolescente de 14 años que le toca vivir esta jornada en el lado oscuro de la luna.
¿Cómo contar el horror? ¿Es posible representarlo? Koltai ha elegido imágenes de una negra poesía, postales oníricas de dulces pesadillas. El color (como buen director de fotografía) es su gran aliado. Los momentos en los campos de concentración nazis son grises y desteñidos, empalidecen con la progresión de la historia, que empieza casi en un sepia de preguerra, colores que se pierden cuanto más avanza el imperio del mal. ¿Qué otro color que el no color puede retratar esos días? La textura de la imagen se vuelve barrosa, sucia, apergaminada, como los caminos intransitables de los campos. Algunas imágenes son alucinaciones en la noche; cito, como ejemplo, la escena en que los prisioneros forman durante todo el día, manteniéndose a duras penas de pie (el que caía, era fusilado).
Hay otro hallazgo en el libro de Kertész y es descubrir la felicidad, aún en esos momentos de horror. El protagonista recuerda, una vez culminada la jornada en la noche, esa media hora posterior al trabajo en los campos, cuando se dejaba descansar a los prisioneros antes de la magra ración de la cena. Una vez liberado, György suspira con melancolía por ese rato. Lo reconoce, una vez fuera, en las callejuelas demolidas de su Budapest natal. El concepto no deja de ser poético, oscuramente poético.
Escenas destacadas: la cena de despedida del papá de György; los prisioneros de pie, durante todo un día, meciéndose en la nieve; el monólogo final de György; los consejos de Bandi Citrom a György.
Frases: en un post de mañana.
CONSEJO: vale la pena. Es una película para ver en el cine.
viernes, diciembre 08, 2006
subtítulos finales
Al terminar “La verdad incómoda”, el documental de Al Gore Jr. sobre el calentamiento global, hay una serie de consejos que cada uno puede seguir para evitar esta amenaza ecológica. Vale la pena leerlos y visitar su sitio en Internet: www.climatecrisis.net.
¿Estás listo para cambiar tu forma de vida? La crisis del clima puede ser resuelta. Así es cómo puedes empezar...
¿Estás listo para cambiar tu forma de vida? La crisis del clima puede ser resuelta. Así es cómo puedes empezar...
Compra aparatos eficientes y focos.
Cambia tu termostato y gasta menos energía para calentar y enfriar.
Protege tu casa, aumenta el aislamiento, evalúa tu consumo.
Recicla.
Si puedes, compra un coche híbrido.
Cuando puedas, camina o viaja en bicicleta. Cuando puedas, usa el metro y el transporte público.
Diles a tus padres que no arruinen el mundo en que vas a vivir.
Si eres padre, únete a tus hijos para salvar su mundo futuro.
Cambia a fuentes renovables de energía. Llama a tu compañía de electricidad a ver si ofrece energía verde. Si dicen que no, pregunta por qué no.
Vota por quienes prometen atacar esta crisis. Escríbele a tu representante en el Congreso. Si no te hacen caso, postúlate para el Congreso.
Planta árboles. Muchos árboles.
Habla en tu comunidad. Llama a programas de radio y escribe a periódicos.
Insiste que Estados Unidos congele sus emisiones de CO2 y únete a esfuerzos globales para detener el calentamiento global.
Reduce nuestra dependencia del petróleo extranjero.
Ayuda a los granjeros a sembrar cultivos de alcohol.
Eleva los niveles de kilometraje requeridos. Exige menores emisiones de los automóviles.
Si crees en rezar, reza por que la gente encuentre la fortaleza para cambiar.
En las palabras del viejo proverbio africano: “Cuando reces, mueve los pies”.
Alienta a todos tus conocidos a ver esta película.
Aprende todo lo que puedas sobre la crisis del clima. Luego pon tus conocimientos en acción.
jueves, diciembre 07, 2006
frases de "La verdad incómoda"
Lo prometido: las mejores frases de “La verdad incómoda”, el documental de Al Gore Jr.
Yo soy Al Gore. Solía ser conocido como el próximo presidente de los Estados Unidos.
Llevo tiempo tratando de hablar de esto. Siento que he fracasado en comunicar el mensaje. Dediqué mucho tiempo a la política. Estoy orgulloso de lo que hice. Hay gente buena, políticos, en ambos partidos, que se distancian de esto, porque si lo aceptaran y lo reconocieran, la obligación moral de hacer cambios sería ineludible.
Se la enseño porque les quiero contar una anécdota de dos maestros. Uno que no me gustaba mucho y otro que fue un héroe para mí. Yo tuve un maestro que enseñaba geografía poniendo un mapa del mundo enfrente del pizarrón. Un compañero mío levantó la mano y señaló el contorno de la costa oriental de Sudamérica y señaló la costa occidental de África y preguntó: "¿Alguna vez encajaron esos dos?" El maestro dijo: “¡Claro que no! ¡Es lo más ridículo que jamás he oído!". Ese estudiante se convirtió en un drogadicto y holgazán. El maestro se convirtió en Consejero de Ciencias del gobierno actual.
“Lo que nos mete en problemas no es lo que no sabemos; es lo que sabemos con seguridad pero que no es así". Este es un concepto clave porque hay otra suposición semejante, que mucha gente tiene sobre el calentamiento global, que simplemente no es verdad. La suposición va más o menos así: la Tierra es tan grande que no podemos tener un impacto dañino duradero sobre ella. Quizá fue verdad en algún momento. Pero ya no.
Después de los primeros 7, 8, 9 años podías ver el patrón que se estaba desarrollando.
En menos de 10 años, ya no existirán “Las Nieves del Kilimanjaro".
Hay un mensaje... Está pasando en todo el mundo. Y el hielo tiene historias que contarnos.
Cuando estuve en la Antártida, vi núcleos como este. Un tipo dijo: "Aquí es cuando el Congreso de Estados Unidos pasó la Ley de Aire Limpio". No lo podía creer pero podías ver la diferencia a simple vista.
A fin de cuentas, esta no es una cuestión política tanto como una cuestión moral. Permitir que esto pase, es deshonesto.
Yo tenía tanta fe en nuestro sistema democrático de autogobierno que pensaba y creía que el relato iba a ser tan impactante que causaría un cambio dramático, en la postura del Congreso. Pensé que ellos se iban a sobresaltar. Pero no fue así. Las luchas, las victorias que no son realmente victorias... las derrotas que no son realmente derrotas... pueden servir para aumentar la importancia de un paso trivial hacia delante, exagerar la aparente importancia de algún revés gigante.
Mi manera de estar en el mundo, todo cambió para mí. ¿Cómo debo pasar mi tiempo sobre la Tierra? Intensifiqué mis esfuerzos... traté de aprender más profundamente.
La posibilidad de perder lo más preciado para mí, me hizo obtener una habilidad que quizá no tenía antes. Pero cuando lo sentí, sentí que realmente podíamos perderlo. Lo que damos por sentado quizá no esté aquí para nuestros hijos.
Y una cuestión que nosotros, como pueblo, necesitamos decidir es cómo reaccionar cuando nos llegan advertencias de los mejores científicos. Hubo otra tormenta en los años 30, de otro tipo. Una tormenta horrible, sin precedente en Europa y Winston Churchill le advirtió al pueblo de Inglaterra, que era distinto a todo lo que había sucedido antes y que tenían que prepararse. Y mucha gente no lo quería creer. Y se puso muy impaciente con todas las vacilaciones y dijo esto: “La época de las dilaciones, de medidas parciales, de recursos calmantes e inesperados, de retrasos, está terminando. En su lugar estamos entrando en un período de consecuencias".
Los errores cometidos en generaciones y siglos anteriores tenían consecuencias que podíamos superar. Ya no podemos darnos ese lujo. Nosotros no lo pedimos, pero aquí está.
Los lugares donde vive la gente fueron escogidos debido a los patrones del clima, que han sido constantes en la Tierra,, desde el final del último período glaciar, hace once mil años. Aquí, en esta granja, los patrones están cambiando. Y parece gradual en el transcurso de una vida humana. Pero en el transcurso del tiempo, definido por este río, está pasando muy, muy rápidamente.
Eso no va a volver a suceder porque los glaciares de Norteamérica no existen.
¿Hay algún otro bloque de hielo grande cerca de ahí? Ah, sí.
Es sumamente frustrante para mí... comunicar esto una y otra vez, tan claramente como puedo y que nosotros sigamos siendo, por mucho, el peor contribuyente al problema. Miro a mi alrededor y busco señales significativas de que nos disponemos a cambiar. No los veo en este momento.
Estamos lidiando con algo sumamente emocional.
Si un problema no está en la punta de la lengua de sus votantes, es fácil para ellos ignorarlo.
Este es hielo flotante y hay hielo terrestre en las pendientes de esas montañas.
De aquí a las montañas son unos 30, 35 km. Creían que esto estaría estable 100 años, aún con el calentamiento global. Los científicos que estudian estas capas de hielo se quedaron boquiabiertos cuando vieron estas imágenes. A partir del 31 de enero de 2002, en un período de 35 días, esta capa de hielo desapareció completamente. No tenían idea de cómo pasó tan rápido.
Piensen en el impacto de 200 mil refugiados cuando los desaloja un suceso ambiental. Y luego imagínense el impacto de 100 millones o más.
La zona donde quedaría el monumento del World Trade Center estaría bajo agua.
¿Debemos prepararnos contra otras amenazas además de los terroristas?
Nos cuesta trabajo desprendernos de los patrones familiares, en los que hemos confiado.
Estamos presenciando un choque entre nuestra civilización y la Tierra.
Piensen en esta fórmula: Viejos hábitos más vieja tecnología, tienen consecuencias predecibles. Viejos hábitos, difíciles de cambiar, más nueva tecnología, pueden tener consecuencias muy alteradas.
Tenemos que pensar de otra manera sobre la guerra. Porque las nuevas tecnologías transforman tanto las consecuencias de ese viejo hábito, que no podemos continuar los patrones del pasado.
Así que debemos examinar nuestra manera de pensar. Nuestra manera de pensar es el factor final que cambia nuestra relación con la Tierra. Si una rana salta a una olla de agua hirviendo, sale enseguida porque siente el peligro. Pero la misma rana, si salta a una olla de agua tibia .que está calentándose poco a poco, se queda ahí y no se mueve. Se quedará ahí, aunque la temperatura siga subiendo y subiendo. Se quedará ahí hasta ser rescatada. Es importante rescatar a la rana. Pero la cuestión es ésta: nuestro sistema nervioso colectivo es como el de la rana. Necesitamos una sacudida antes de percibir un peligro. Si parece gradual, aunque esté pasando rápidamente, somos capaces de quedarnos sentados sin responder y sin reaccionar.
La idea de que nosotros habíamos sido parte de ese patrón económico, que produjo los cigarrillos, que produjeron el cáncer fue muy dolorosa a muchos niveles. Mi padre, que había cultivado tabaco toda su vida, lo dejó. Todas las explicaciones que habían tenido sentido en el pasado dejaron de tenerlo. Él paró. Es parte de la naturaleza humana tardar en hilar un razonamiento. También sé que puede llegar un día de rendir cuentas en que quisieras haber hilado el razonamiento más rápido.
El concepto de que hay un desacuerdo sobre los hechos ha sido creado deliberadamente por un pequeño grupo de gente. Uno de sus memorándums internos fue revelado. Esto es lo que decía, según la prensa. Su objetivo es: "Reclasificar el calentamiento global como teoría en vez de un hecho".
“La duda es nuestro producto ya que es la mejor manera de crear controversia entre el público".
Recordarán que hubo 928 artículos revisados por científicos. Cero por ciento rechazó el consenso sobre el calentamiento global. Hubo otro estudio de los artículos en la prensa de los últimos 14 años. Vieron una muestra de 636. Más de la mitad decían: "No estamos seguros. Puede ser un problema, puede que no". Con razón la gente está confundida.
Los científicos tienen una obligación independiente de respetar y presentar la verdad que ven. ¿Por qué se contradice directamente en el testimonio que está dando sobre esta pregunta científica?
Hace más de cien años, Upton Sinclair escribió: “Es difícil hacer que un hombre entienda algo si su salario depende de no entenderlo"
El segundo concepto erróneo: ¿hay que escoger entre la economía y el ambiente? (…) Esta es una elección falsa por dos razones. Número uno: si no tenemos un planeta... La segunda es que si hacemos lo correcto, vamos a crear mucha riqueza y muchos trabajos porque hacer lo correcto nos mueve hacia adelante.
Me fijé una meta: comunicar esto muy claramente. Y tengo fe que pronto, suficientes mentes cambiarán de parecer, para cruzar un umbral.
Última idea errónea: si aceptamos que este problema es real, quizá sea demasiado grande para poder hacer algo. Hay mucha gente que pasa directo de negación a desesperación, sin detenerse en el paso intermedio: hacer algo acerca del problema.
Tenemos todo lo que necesitamos excepto, quizá, voluntad política. ¿Pero saben qué? En Estados Unidos la voluntad política es un recurso renovable.
Tenemos la capacidad para hacer esto. Cada uno de nosotros causa calentamiento global. Pero todos podemos hacer cambios con las cosas que compramos, la electricidad que usamos, nuestros coches. Podemos decidir bajar las emisiones de carbono a cero. Tenemos las soluciones en nuestras manos. Necesitamos la determinación para ponerlas en vigor.
Finalmente, la cuestión se reduce a esto: ¿somos capaces de elevarnos por encima
de nosotros y de la historia? El pasado indica que tenemos esa capacidad. Formamos una nación, hicimos una revolución y creamos algo nuevo en la Tierra: una nación libre que garantizaba la libertad individual. Estados Unidos tomó una decisión moral. El esclavismo estaba mal y no podíamos ser mitad libres y mitad esclavos. Como estadounidenses, decidimos que las mujeres, por supuesto, tenían derecho al voto. Vencimos el totalitarismo y ganamos una guerra en el Pacífico y el Atlántico simultáneamente. Abolimos la segregación en nuestras escuelas. Y curamos enfermedades temibles como la poliomielitis. ¡Aterrizamos en la luna! El mejor ejemplo de lo que es posible cuando nos esmeramos. Trabajamos juntos para acabar con el comunismo. Hasta resolvimos una crisis ambiental global antes. El agujero en la capa de ozono en la estratosfera. Decían que era imposible resolver eso porque es un reto del medio ambiente global que exige cooperación de todos los países del mundo. Pero lo enfrentamos. Estados Unidos tomó la iniciativa y eliminó las sustancias responsables. Ahora tenemos que usar nuestros procesos democráticos y actuar juntos para resolver estos problemas. Pero necesitamos una perspectiva distinta para éste. Es diferente a todos los problemas anteriores.
¿Se acuerdan de la película de la Tierra girando en el espacio? Una de esas naves que mandamos hacia el universo estaba a 4 mil millones de km de distancia... Carl Sagan dijo: "Hay que tomar otra foto de la Tierra". ¿Ven ese punto azul pálido? Esos somos nosotros. Todo lo que ha pasado en toda la historia humana, ha sucedido en ese pixel. Todos los triunfos y todas las tragedias, todas las guerras, todas las hambrunas, todos los avances importantes. Es nuestro único hogar. Y eso es lo que está en juego... Nuestra capacidad de vivir en el planeta Tierra... de tener un futuro como civilización. Yo creo que esta es una cuestión moral. Ahora es cuando ustedes deben encarar este problema. Es cuando debemos elevarnos para asegurar nuestro futuro.
No es nada fuera de lo común lo que estoy haciendo con esto. Lo fuera de lo común fue que tuve el privilegio de verlo de joven.
“¿Ven eso?", dijo, "¿Ven eso?" “Ese es el futuro en el que van a vivir su vida". Las futuras generaciones quizá se pregunten: “¿Qué estaban pensando nuestros padres? ¿Por qué no despertaron cuando tuvieron la oportunidad?". >Necesitamos que nos hagan esa pregunta ahora.
Mañana los subtítulos finales de “La verdad incómoda”, con los consejos para evitar la amenaza del calentamiento global.
Yo soy Al Gore. Solía ser conocido como el próximo presidente de los Estados Unidos.
Llevo tiempo tratando de hablar de esto. Siento que he fracasado en comunicar el mensaje. Dediqué mucho tiempo a la política. Estoy orgulloso de lo que hice. Hay gente buena, políticos, en ambos partidos, que se distancian de esto, porque si lo aceptaran y lo reconocieran, la obligación moral de hacer cambios sería ineludible.
Se la enseño porque les quiero contar una anécdota de dos maestros. Uno que no me gustaba mucho y otro que fue un héroe para mí. Yo tuve un maestro que enseñaba geografía poniendo un mapa del mundo enfrente del pizarrón. Un compañero mío levantó la mano y señaló el contorno de la costa oriental de Sudamérica y señaló la costa occidental de África y preguntó: "¿Alguna vez encajaron esos dos?" El maestro dijo: “¡Claro que no! ¡Es lo más ridículo que jamás he oído!". Ese estudiante se convirtió en un drogadicto y holgazán. El maestro se convirtió en Consejero de Ciencias del gobierno actual.
“Lo que nos mete en problemas no es lo que no sabemos; es lo que sabemos con seguridad pero que no es así". Este es un concepto clave porque hay otra suposición semejante, que mucha gente tiene sobre el calentamiento global, que simplemente no es verdad. La suposición va más o menos así: la Tierra es tan grande que no podemos tener un impacto dañino duradero sobre ella. Quizá fue verdad en algún momento. Pero ya no.
Después de los primeros 7, 8, 9 años podías ver el patrón que se estaba desarrollando.
En menos de 10 años, ya no existirán “Las Nieves del Kilimanjaro".
Hay un mensaje... Está pasando en todo el mundo. Y el hielo tiene historias que contarnos.
Cuando estuve en la Antártida, vi núcleos como este. Un tipo dijo: "Aquí es cuando el Congreso de Estados Unidos pasó la Ley de Aire Limpio". No lo podía creer pero podías ver la diferencia a simple vista.
A fin de cuentas, esta no es una cuestión política tanto como una cuestión moral. Permitir que esto pase, es deshonesto.
Yo tenía tanta fe en nuestro sistema democrático de autogobierno que pensaba y creía que el relato iba a ser tan impactante que causaría un cambio dramático, en la postura del Congreso. Pensé que ellos se iban a sobresaltar. Pero no fue así. Las luchas, las victorias que no son realmente victorias... las derrotas que no son realmente derrotas... pueden servir para aumentar la importancia de un paso trivial hacia delante, exagerar la aparente importancia de algún revés gigante.
Mi manera de estar en el mundo, todo cambió para mí. ¿Cómo debo pasar mi tiempo sobre la Tierra? Intensifiqué mis esfuerzos... traté de aprender más profundamente.
La posibilidad de perder lo más preciado para mí, me hizo obtener una habilidad que quizá no tenía antes. Pero cuando lo sentí, sentí que realmente podíamos perderlo. Lo que damos por sentado quizá no esté aquí para nuestros hijos.
Y una cuestión que nosotros, como pueblo, necesitamos decidir es cómo reaccionar cuando nos llegan advertencias de los mejores científicos. Hubo otra tormenta en los años 30, de otro tipo. Una tormenta horrible, sin precedente en Europa y Winston Churchill le advirtió al pueblo de Inglaterra, que era distinto a todo lo que había sucedido antes y que tenían que prepararse. Y mucha gente no lo quería creer. Y se puso muy impaciente con todas las vacilaciones y dijo esto: “La época de las dilaciones, de medidas parciales, de recursos calmantes e inesperados, de retrasos, está terminando. En su lugar estamos entrando en un período de consecuencias".
Los errores cometidos en generaciones y siglos anteriores tenían consecuencias que podíamos superar. Ya no podemos darnos ese lujo. Nosotros no lo pedimos, pero aquí está.
Los lugares donde vive la gente fueron escogidos debido a los patrones del clima, que han sido constantes en la Tierra,, desde el final del último período glaciar, hace once mil años. Aquí, en esta granja, los patrones están cambiando. Y parece gradual en el transcurso de una vida humana. Pero en el transcurso del tiempo, definido por este río, está pasando muy, muy rápidamente.
Eso no va a volver a suceder porque los glaciares de Norteamérica no existen.
¿Hay algún otro bloque de hielo grande cerca de ahí? Ah, sí.
Es sumamente frustrante para mí... comunicar esto una y otra vez, tan claramente como puedo y que nosotros sigamos siendo, por mucho, el peor contribuyente al problema. Miro a mi alrededor y busco señales significativas de que nos disponemos a cambiar. No los veo en este momento.
Estamos lidiando con algo sumamente emocional.
Si un problema no está en la punta de la lengua de sus votantes, es fácil para ellos ignorarlo.
Este es hielo flotante y hay hielo terrestre en las pendientes de esas montañas.
De aquí a las montañas son unos 30, 35 km. Creían que esto estaría estable 100 años, aún con el calentamiento global. Los científicos que estudian estas capas de hielo se quedaron boquiabiertos cuando vieron estas imágenes. A partir del 31 de enero de 2002, en un período de 35 días, esta capa de hielo desapareció completamente. No tenían idea de cómo pasó tan rápido.
Piensen en el impacto de 200 mil refugiados cuando los desaloja un suceso ambiental. Y luego imagínense el impacto de 100 millones o más.
La zona donde quedaría el monumento del World Trade Center estaría bajo agua.
¿Debemos prepararnos contra otras amenazas además de los terroristas?
Nos cuesta trabajo desprendernos de los patrones familiares, en los que hemos confiado.
Estamos presenciando un choque entre nuestra civilización y la Tierra.
Piensen en esta fórmula: Viejos hábitos más vieja tecnología, tienen consecuencias predecibles. Viejos hábitos, difíciles de cambiar, más nueva tecnología, pueden tener consecuencias muy alteradas.
Tenemos que pensar de otra manera sobre la guerra. Porque las nuevas tecnologías transforman tanto las consecuencias de ese viejo hábito, que no podemos continuar los patrones del pasado.
Así que debemos examinar nuestra manera de pensar. Nuestra manera de pensar es el factor final que cambia nuestra relación con la Tierra. Si una rana salta a una olla de agua hirviendo, sale enseguida porque siente el peligro. Pero la misma rana, si salta a una olla de agua tibia .que está calentándose poco a poco, se queda ahí y no se mueve. Se quedará ahí, aunque la temperatura siga subiendo y subiendo. Se quedará ahí hasta ser rescatada. Es importante rescatar a la rana. Pero la cuestión es ésta: nuestro sistema nervioso colectivo es como el de la rana. Necesitamos una sacudida antes de percibir un peligro. Si parece gradual, aunque esté pasando rápidamente, somos capaces de quedarnos sentados sin responder y sin reaccionar.
La idea de que nosotros habíamos sido parte de ese patrón económico, que produjo los cigarrillos, que produjeron el cáncer fue muy dolorosa a muchos niveles. Mi padre, que había cultivado tabaco toda su vida, lo dejó. Todas las explicaciones que habían tenido sentido en el pasado dejaron de tenerlo. Él paró. Es parte de la naturaleza humana tardar en hilar un razonamiento. También sé que puede llegar un día de rendir cuentas en que quisieras haber hilado el razonamiento más rápido.
El concepto de que hay un desacuerdo sobre los hechos ha sido creado deliberadamente por un pequeño grupo de gente. Uno de sus memorándums internos fue revelado. Esto es lo que decía, según la prensa. Su objetivo es: "Reclasificar el calentamiento global como teoría en vez de un hecho".
“La duda es nuestro producto ya que es la mejor manera de crear controversia entre el público".
Recordarán que hubo 928 artículos revisados por científicos. Cero por ciento rechazó el consenso sobre el calentamiento global. Hubo otro estudio de los artículos en la prensa de los últimos 14 años. Vieron una muestra de 636. Más de la mitad decían: "No estamos seguros. Puede ser un problema, puede que no". Con razón la gente está confundida.
Los científicos tienen una obligación independiente de respetar y presentar la verdad que ven. ¿Por qué se contradice directamente en el testimonio que está dando sobre esta pregunta científica?
Hace más de cien años, Upton Sinclair escribió: “Es difícil hacer que un hombre entienda algo si su salario depende de no entenderlo"
El segundo concepto erróneo: ¿hay que escoger entre la economía y el ambiente? (…) Esta es una elección falsa por dos razones. Número uno: si no tenemos un planeta... La segunda es que si hacemos lo correcto, vamos a crear mucha riqueza y muchos trabajos porque hacer lo correcto nos mueve hacia adelante.
Me fijé una meta: comunicar esto muy claramente. Y tengo fe que pronto, suficientes mentes cambiarán de parecer, para cruzar un umbral.
Última idea errónea: si aceptamos que este problema es real, quizá sea demasiado grande para poder hacer algo. Hay mucha gente que pasa directo de negación a desesperación, sin detenerse en el paso intermedio: hacer algo acerca del problema.
Tenemos todo lo que necesitamos excepto, quizá, voluntad política. ¿Pero saben qué? En Estados Unidos la voluntad política es un recurso renovable.
Tenemos la capacidad para hacer esto. Cada uno de nosotros causa calentamiento global. Pero todos podemos hacer cambios con las cosas que compramos, la electricidad que usamos, nuestros coches. Podemos decidir bajar las emisiones de carbono a cero. Tenemos las soluciones en nuestras manos. Necesitamos la determinación para ponerlas en vigor.
Finalmente, la cuestión se reduce a esto: ¿somos capaces de elevarnos por encima
de nosotros y de la historia? El pasado indica que tenemos esa capacidad. Formamos una nación, hicimos una revolución y creamos algo nuevo en la Tierra: una nación libre que garantizaba la libertad individual. Estados Unidos tomó una decisión moral. El esclavismo estaba mal y no podíamos ser mitad libres y mitad esclavos. Como estadounidenses, decidimos que las mujeres, por supuesto, tenían derecho al voto. Vencimos el totalitarismo y ganamos una guerra en el Pacífico y el Atlántico simultáneamente. Abolimos la segregación en nuestras escuelas. Y curamos enfermedades temibles como la poliomielitis. ¡Aterrizamos en la luna! El mejor ejemplo de lo que es posible cuando nos esmeramos. Trabajamos juntos para acabar con el comunismo. Hasta resolvimos una crisis ambiental global antes. El agujero en la capa de ozono en la estratosfera. Decían que era imposible resolver eso porque es un reto del medio ambiente global que exige cooperación de todos los países del mundo. Pero lo enfrentamos. Estados Unidos tomó la iniciativa y eliminó las sustancias responsables. Ahora tenemos que usar nuestros procesos democráticos y actuar juntos para resolver estos problemas. Pero necesitamos una perspectiva distinta para éste. Es diferente a todos los problemas anteriores.
¿Se acuerdan de la película de la Tierra girando en el espacio? Una de esas naves que mandamos hacia el universo estaba a 4 mil millones de km de distancia... Carl Sagan dijo: "Hay que tomar otra foto de la Tierra". ¿Ven ese punto azul pálido? Esos somos nosotros. Todo lo que ha pasado en toda la historia humana, ha sucedido en ese pixel. Todos los triunfos y todas las tragedias, todas las guerras, todas las hambrunas, todos los avances importantes. Es nuestro único hogar. Y eso es lo que está en juego... Nuestra capacidad de vivir en el planeta Tierra... de tener un futuro como civilización. Yo creo que esta es una cuestión moral. Ahora es cuando ustedes deben encarar este problema. Es cuando debemos elevarnos para asegurar nuestro futuro.
No es nada fuera de lo común lo que estoy haciendo con esto. Lo fuera de lo común fue que tuve el privilegio de verlo de joven.
“¿Ven eso?", dijo, "¿Ven eso?" “Ese es el futuro en el que van a vivir su vida". Las futuras generaciones quizá se pregunten: “¿Qué estaban pensando nuestros padres? ¿Por qué no despertaron cuando tuvieron la oportunidad?". >Necesitamos que nos hagan esa pregunta ahora.
Mañana los subtítulos finales de “La verdad incómoda”, con los consejos para evitar la amenaza del calentamiento global.
miércoles, diciembre 06, 2006
sobre una bomba de tiempo
LA VERDAD INCÓMODA
Desde varios puntos, “La verdad incómoda” es un documental notable. En primer lugar, es un ejemplo de claridad expositiva. Si usted tiene que explicar un tema técnico de cierta complejidad y quiere ver como ser lo más didáctico posible, “La verdad incómoda” es un material de referencia ineludible. Es una delicia observar como expone Al Gore, de la manera más clara posible, la amenaza del calentamiento global. Pequeños detalles que conmueven más que la simple exposición de los números. Por ejemplo: para mostrar un valor ostensiblemente fuera de escala, recurre a una grúa. Otra: el gráfico de las corrientes marinas y el efecto del derretimiento de un glaciar en el Atlántico Norte.
En segunda lugar, el documental le ha dado un espacio a su protagonista, el ex vicepresidente Al Gore Jr., para reflexionar sobre los mecanismos del poder. Su desencanto ante la estructura política que ignoró su prédica contra el calentamiento global, es una película dentro de la película. Por momentos, la lucha del hombre solo resulta poética. Su caminata por los pasillos del aeropuerto, buscando un signo (inexistente) que indique que sus palabras están teniendo un efecto en la población, posee una honda melancolía y desencanto. La maldición de Cassandra, el hombre que ve la marcha alocada hacia el precipicio, sin que nadie intente, siquiera, disminuir la velocidad del daño.
Finalmente, “La verdad incómoda” logra algo más que describir la inmensa estupidez de la especie humana y la estrechez de miras de la codicia a corto plazo. Al Gore logra inspirar, apelando a lo mejor del ser humano, motivando el cambio, poniendo la responsabilidad de la mutación mental que necesitará la resolución de este problema, en manos de cada uno. Gore trae al escenario político algo que ya está pasado de moda en la sociedad: preguntarse si es honesto continuar con una política.
En los títulos finales, hay una serie de medidas que puede aplicar cada uno para evitar el calentamiento global. Uno de ellos es: “Escríbale a su representante al Congreso. Si no obtiene respuesta, postúlese”. Democracia con mayúsculas. La mejor herencia que los Estados Unidos le dieron a la humanidad. Un hombre puede ser la diferencia.
Cuando uno observa a un político como Al Gore en escena (aún aceptando que manipula el discurso y el medio) uno tiende a preguntarse, casi sin poder impedirlo, ¿cómo puede ser que los Estados Unidos hayan elegido al pavo que tienen de presidente en detrimento de éste? La segunda pregunta es inevitable: ¿habrá algún político argentino que puede exhibir tal nivel intelectual?
Más allá de todos estos chiches técnicos e intelectuales, “La verdad incómoda” opera con una necesidad extracinematográfica. No va a redefinir el género como tampoco lo hacen “Fahrenheit 9/11” o “Whisky Romeo Zulú”. Pero son documentales militantes, necesarios, absolutamente imprescindibles. Son otra forma más de hacer política, pero política en serio, la de discusión de los temas que deben ser incluidos en la agenda política de la sociedad. Más allá de la precisión de algún dato particular o de un número tomado en detalle, Al Gore muestra, descarnadamente, que el calentamiento global no es una teoría, sino un hecho y que los efectos de este hecho ya son tangibles y tienen nombres y apellidos como Katrina. ¿Qué más necesitamos para afrontar este problema?
Escenas destacadas: la secuencia del recuerdo de la chica que cuidaba a Gore de niño, fallecida de cáncer de pulmón; la secuencia de la exhibición de la temperatura mundial correlacionada con el dioxido de carbono en la atmósfera; los títulos finales.
Las mejores frases del filme, mañana.
CONSEJO: ir a verla. De visión obligatoria y difusión más obligatoria todavía.
domingo, diciembre 03, 2006
frases de “Los infiltrados”
Lo prometido ayer, las mejores frases de “Los infiltrados”, el filme de Martin Scorsese:
No quiero ser un producto de mi medio. Quiero que mi medio sea un producto de mi. Hace años teníamos la Iglesia. Era la forma de decir que nos teníamos unos a otros. Pero ahora, no sé, es extraño, te han metido el odio en el corazón. Los Caballeros de Colón eran verdaderos tipos duros. Italianos originales. Ellos se adueñaron de su pedazo de la ciudad. Veinte años después del tiempo en que un irlandés no podía conseguir trabajo, ya teníamos un Presidente. Puede descansar en paz. Eso es lo que los negros no entienden. Si hay algo que tengo en contra de los negros, es esto. Nadie te va dar nada. Tienes que tomarlo.
La Iglesia me aburre. Arrodíllate, párate, arrodíllate otra vez. Si te gusta ese tipo de cosas, no sé en qué te ayuda. Un hombre hace su propio camino, nadie se lo hace. Tienes que tomarlo.
Todo el mundo siempre quiere ser alguien. Cuando decidas ser algo, puedes serlo. Eso no te lo dicen en la iglesia. Cuando tenía tu edad me decían que uno se hace policía o criminal. Hoy en día lo que digo es esto: cuando enfrentas un arma cargada... ¿Cuál es la diferencia?
Si supieras lo que hacemos no seríamos buenos en lo que hacemos.
Tu maldita familia es una colección de escorias. Pero tú te criaste en la parte norte. Un niñito bueno. Un tiempo con tu mamá, en la clase media alta, y luego con tu padre... el burro en un pobre barrio de mierda. ¿No es cierto? ¿Tienes dos acentos? Seguro que sí, maldita serpiente, eres como dos personas distintas.
Tenemos una pregunta. ¿Quieres ser policía o parecer un policía? Es una pregunta seria. Mucha gente quiere parecer policías. Tener una placa, andar armados, parecer que están en la TV. Muchos sólo quieren reventarle la cabeza a un negro contra el parabrisas.
-Yo sé lo que eres. ¿OK? Sé lo que eres y lo que no eres. Soy el mas franco que hay en la tierra y te haré entender algo. ¡Tú no eres un maldito policía!
-Billy, no hemos hablado de lo que hacemos, pero lo que no hacemos... es engañarnos. Dentro de 5 años puedes ser cualquier cosa que quieras. Pero no un policía estatal de Massachussets.
-¿Está seguro?
-Estoy seguro.
Es precioso. Techo alto, piso de madera, el baño es inmenso. El refrigerador tiene una alarma, por si se te está acabando algo. Es gracioso. Tiene una gran vista de la Gobernación. Una vez que te mudes aquí, ya eres de la clase alta.
-Jugo de arándano.
-Es un diurético natural. Mi hija lo bebe cuando tiene el período. ¿Tienes la regla?
Ustedes los federales son como los hongos. Hay que alimentarlos con mierda y dejarlos en la oscuridad.
Lo que Freud dijo de los irlandeses es que somos los únicos inmunes al psicoanálisis.
-¿Conoces a John Lennon?
-Sí, seguro. Fue presidente antes de Lincoln.
-Lennon dijo: “Soy un artista. Denme una jodida tuba y sacaré algo.
-Yo, señor Costello, le sacaría dinero.
-Eres muy respondón. Está mal. Es una lástima… Lo que intento que entiendas con lo de John Lennon, es que un hombre puede mirar cualquier cosa y hacer algo de ella. Por ejemplo, yo te miro, y pienso. ¿Para qué podría usarte?
Me siento junto a un asesino múltiple. Un asesino múltiple. Un maldito sin corazón. Y completamente calmado. Me di cuenta de algo sobre mí, en prisión. Mi mano no tiembla. Jamás.
-Un policía salía cuando yo entré.
-¿Cómo sabes que era policía?
-No tenía sentido de la elegancia y tenía un ligero aroma a basura arrogante. ¿Entonces vienen y lloran, esos policías?
-A veces sí. Claro, a veces lloran. Si tienen problemas en casa o usaron sus armas.
-¿Por usar sus armas? Te diré algo. Se enlistaron para usar sus armas. La mayoría. Pero como ven la TV, saben que tienen que llorar después de usarlas.
No hay nadie que mienta más que un policía. Excepto los policías de la TV.
-Me estoy volviendo loco, no puedo estar golpeando gente todos los días.
-¡Ya llevo un año así, es demasiado!
-Cálmate. Mucha gente en el mundo lo hace todos los días. ¿Cuál es el problema?
-Yo no soy ellos, carajo. ¡No lo soy!
-Exacto, no eres nadie.
-¿Qué esperas al venir aquí?
-Vengo obligado.
-Sé que tienes que venir, pero una vez que ya viniste... ¿Qué quieres?
-¿Te digo la verdad? Valium.
-Si dijeras una mentira sería más fácil.
-Con eso te ganas la vida.
-Debemos vernos más antes de hablar de pastillas.
-Mira, estoy teniendo ataques de pánico. A veces siento que me dará un infarto.
Vomité en un basurero cuando venía para acá. ¡No duermo hace semanas!
-¿Eso es cierto?
-¡Sí, es cierto! Me pediste la verdad, te dije que necesito calmantes. ¿Y por eso cierras mi caso? ¿Eso harás?
-No lo cerré, es que...
-¡Pensé que debía decir la verdad aquí!
-Así es, es cierto.
-Uno deja caer todos sus instintos de privacidad y protección... ¿Y qué haces? ¿Me mandas a la calle para que busque drogas? ¿Eso haces?
LA PSICOLÓGA ARROJA UN BLISTER CON DOS PASTILLAS SOBRE LA MESA.
-Es ridículo. ¿Dos pastillas? ¿Por qué no mes das una botella de licor y un arma para que me reviente la cabeza?
-¿Por qué el último paciente del día siempre es el mas difícil?
-Porque estás cansada y además no te importa.
-Todos los celulares están bajo vigilancia, gracias a la gentileza de nuestros amigos los federales.
-¡Acta Patriota! ¡Acta Patriota! ¡La amo, la amo, la amo!
Me preocupan los chinos que creen que es inteligente venir a una transacción de negocios con armas automáticas. Para su propio bien dile a Bruce Lee y sus Karate Kid que nosotros no. Porque en este país no le añadimos pulgadas al pene.
Te puede costar cadena perpetua.
Si estos chinos quieren un nuevo Taiwán, que se muevan y muestren un millón de dólares. Lo que generalmente hacemos en este país, es que un hombre trae el producto. Y el otro paga. No ticket, no ropa.
De donde yo vengo no colgamos fotos. Respeto quien eres, pero en la sala no.
Me da la sensación que hay un policía en mi equipo.
-¿Tienes un jefe con una laringotomía?
-No, ese tipo trabaja para mí.
-Me estás mintiendo.
-No exactamente.
-Te vamos a atrapar.
-Si no has podido, no podrás. Pero tienes derecho a enfrentar tu propia crisis.
El matrimonio es parte importante de quién eres. La gente sabe que no eres marica. La gente sabe que eres estable. Ven el anillo y saben que alguien soporta a ese hijo de puta. Las mujeres ven el anillo y piensan inmediatamente que debes tener algo de dinero y un pene sabroso.
Frank, tienes que confiar en mi. Solo confía en mi, Frank. Debo encontrar a quien miente. Yo soy muy bueno en eso.
Tal vez porque siempre ha sido fácil para mi conseguir mujeres, nunca he entendido eso de masturbarse en un cine. ¿Quién sabe lo que es fácil?
Huele a rata.
-Ya tienes 70 años, Frank. Solo digo... que uno de tus hombres intentará matarte. Uno de los tuyos. Y todavía negocias con drogas. ¿Para qué? No necesitas el dinero. Eres un dolor en el trasero. Y te atraparán.
-No necesito dinero nuevo, porque tengo el viejo. Para decir la verdad... tampoco necesito sexo ya. Aunque me gusta. Lo que me molesta es que tengo estas ratas...
-La pregunta es... y sería la única pregunta... ¿Quién cree que puede hacer lo que haces mejor que tú mismo?
-Él único que hace lo que yo hago soy yo. Enseñarle a la gente a morir, eso lo hago yo. ¿No quieres ser yo?
-Probablemente podría ser tú, sí. Eso lo sé. Pero no quiero ser tú, Frank. No me interesa.
-Pesada es la corona. ¿Me entiendes?
¿Alguno de ustedes tiene fuego?
-¿Sabes de qué me di cuenta?
-¿Qué?
-El que no estuviera ahí, es el traidor.
-¿Y?
-Tú jamás has llegado tarde. Y... cuando te llamé... cometí un error.
Te di la dirección mal. Pero te apareciste en la correcta. ¿Dime por qué?
¡Dime por qué!
Eso es lo que pasa entre ratas, todos desconfían.
-¿No te interesa seguir siendo policía?
-No dije eso. Ser policía es mi trabajo. Quiero recuperar mi identidad.
La muerte es un arte. La vida es mucho más fácil.
Solo uno de nosotros es policía ahora Bill. ¿Entiendes?
¡Nadie sabe quien eres!
-Mátame. ¡Sólo mátame!
-Te estoy matando.
-Okey.
No quiero ser un producto de mi medio. Quiero que mi medio sea un producto de mi. Hace años teníamos la Iglesia. Era la forma de decir que nos teníamos unos a otros. Pero ahora, no sé, es extraño, te han metido el odio en el corazón. Los Caballeros de Colón eran verdaderos tipos duros. Italianos originales. Ellos se adueñaron de su pedazo de la ciudad. Veinte años después del tiempo en que un irlandés no podía conseguir trabajo, ya teníamos un Presidente. Puede descansar en paz. Eso es lo que los negros no entienden. Si hay algo que tengo en contra de los negros, es esto. Nadie te va dar nada. Tienes que tomarlo.
La Iglesia me aburre. Arrodíllate, párate, arrodíllate otra vez. Si te gusta ese tipo de cosas, no sé en qué te ayuda. Un hombre hace su propio camino, nadie se lo hace. Tienes que tomarlo.
Todo el mundo siempre quiere ser alguien. Cuando decidas ser algo, puedes serlo. Eso no te lo dicen en la iglesia. Cuando tenía tu edad me decían que uno se hace policía o criminal. Hoy en día lo que digo es esto: cuando enfrentas un arma cargada... ¿Cuál es la diferencia?
Si supieras lo que hacemos no seríamos buenos en lo que hacemos.
Tu maldita familia es una colección de escorias. Pero tú te criaste en la parte norte. Un niñito bueno. Un tiempo con tu mamá, en la clase media alta, y luego con tu padre... el burro en un pobre barrio de mierda. ¿No es cierto? ¿Tienes dos acentos? Seguro que sí, maldita serpiente, eres como dos personas distintas.
Tenemos una pregunta. ¿Quieres ser policía o parecer un policía? Es una pregunta seria. Mucha gente quiere parecer policías. Tener una placa, andar armados, parecer que están en la TV. Muchos sólo quieren reventarle la cabeza a un negro contra el parabrisas.
-Yo sé lo que eres. ¿OK? Sé lo que eres y lo que no eres. Soy el mas franco que hay en la tierra y te haré entender algo. ¡Tú no eres un maldito policía!
-Billy, no hemos hablado de lo que hacemos, pero lo que no hacemos... es engañarnos. Dentro de 5 años puedes ser cualquier cosa que quieras. Pero no un policía estatal de Massachussets.
-¿Está seguro?
-Estoy seguro.
Es precioso. Techo alto, piso de madera, el baño es inmenso. El refrigerador tiene una alarma, por si se te está acabando algo. Es gracioso. Tiene una gran vista de la Gobernación. Una vez que te mudes aquí, ya eres de la clase alta.
-Jugo de arándano.
-Es un diurético natural. Mi hija lo bebe cuando tiene el período. ¿Tienes la regla?
Ustedes los federales son como los hongos. Hay que alimentarlos con mierda y dejarlos en la oscuridad.
Lo que Freud dijo de los irlandeses es que somos los únicos inmunes al psicoanálisis.
-¿Conoces a John Lennon?
-Sí, seguro. Fue presidente antes de Lincoln.
-Lennon dijo: “Soy un artista. Denme una jodida tuba y sacaré algo.
-Yo, señor Costello, le sacaría dinero.
-Eres muy respondón. Está mal. Es una lástima… Lo que intento que entiendas con lo de John Lennon, es que un hombre puede mirar cualquier cosa y hacer algo de ella. Por ejemplo, yo te miro, y pienso. ¿Para qué podría usarte?
Me siento junto a un asesino múltiple. Un asesino múltiple. Un maldito sin corazón. Y completamente calmado. Me di cuenta de algo sobre mí, en prisión. Mi mano no tiembla. Jamás.
-Un policía salía cuando yo entré.
-¿Cómo sabes que era policía?
-No tenía sentido de la elegancia y tenía un ligero aroma a basura arrogante. ¿Entonces vienen y lloran, esos policías?
-A veces sí. Claro, a veces lloran. Si tienen problemas en casa o usaron sus armas.
-¿Por usar sus armas? Te diré algo. Se enlistaron para usar sus armas. La mayoría. Pero como ven la TV, saben que tienen que llorar después de usarlas.
No hay nadie que mienta más que un policía. Excepto los policías de la TV.
-Me estoy volviendo loco, no puedo estar golpeando gente todos los días.
-¡Ya llevo un año así, es demasiado!
-Cálmate. Mucha gente en el mundo lo hace todos los días. ¿Cuál es el problema?
-Yo no soy ellos, carajo. ¡No lo soy!
-Exacto, no eres nadie.
-¿Qué esperas al venir aquí?
-Vengo obligado.
-Sé que tienes que venir, pero una vez que ya viniste... ¿Qué quieres?
-¿Te digo la verdad? Valium.
-Si dijeras una mentira sería más fácil.
-Con eso te ganas la vida.
-Debemos vernos más antes de hablar de pastillas.
-Mira, estoy teniendo ataques de pánico. A veces siento que me dará un infarto.
Vomité en un basurero cuando venía para acá. ¡No duermo hace semanas!
-¿Eso es cierto?
-¡Sí, es cierto! Me pediste la verdad, te dije que necesito calmantes. ¿Y por eso cierras mi caso? ¿Eso harás?
-No lo cerré, es que...
-¡Pensé que debía decir la verdad aquí!
-Así es, es cierto.
-Uno deja caer todos sus instintos de privacidad y protección... ¿Y qué haces? ¿Me mandas a la calle para que busque drogas? ¿Eso haces?
LA PSICOLÓGA ARROJA UN BLISTER CON DOS PASTILLAS SOBRE LA MESA.
-Es ridículo. ¿Dos pastillas? ¿Por qué no mes das una botella de licor y un arma para que me reviente la cabeza?
-¿Por qué el último paciente del día siempre es el mas difícil?
-Porque estás cansada y además no te importa.
-Todos los celulares están bajo vigilancia, gracias a la gentileza de nuestros amigos los federales.
-¡Acta Patriota! ¡Acta Patriota! ¡La amo, la amo, la amo!
Me preocupan los chinos que creen que es inteligente venir a una transacción de negocios con armas automáticas. Para su propio bien dile a Bruce Lee y sus Karate Kid que nosotros no. Porque en este país no le añadimos pulgadas al pene.
Te puede costar cadena perpetua.
Si estos chinos quieren un nuevo Taiwán, que se muevan y muestren un millón de dólares. Lo que generalmente hacemos en este país, es que un hombre trae el producto. Y el otro paga. No ticket, no ropa.
De donde yo vengo no colgamos fotos. Respeto quien eres, pero en la sala no.
Me da la sensación que hay un policía en mi equipo.
-¿Tienes un jefe con una laringotomía?
-No, ese tipo trabaja para mí.
-Me estás mintiendo.
-No exactamente.
-Te vamos a atrapar.
-Si no has podido, no podrás. Pero tienes derecho a enfrentar tu propia crisis.
El matrimonio es parte importante de quién eres. La gente sabe que no eres marica. La gente sabe que eres estable. Ven el anillo y saben que alguien soporta a ese hijo de puta. Las mujeres ven el anillo y piensan inmediatamente que debes tener algo de dinero y un pene sabroso.
Frank, tienes que confiar en mi. Solo confía en mi, Frank. Debo encontrar a quien miente. Yo soy muy bueno en eso.
Tal vez porque siempre ha sido fácil para mi conseguir mujeres, nunca he entendido eso de masturbarse en un cine. ¿Quién sabe lo que es fácil?
Huele a rata.
-Ya tienes 70 años, Frank. Solo digo... que uno de tus hombres intentará matarte. Uno de los tuyos. Y todavía negocias con drogas. ¿Para qué? No necesitas el dinero. Eres un dolor en el trasero. Y te atraparán.
-No necesito dinero nuevo, porque tengo el viejo. Para decir la verdad... tampoco necesito sexo ya. Aunque me gusta. Lo que me molesta es que tengo estas ratas...
-La pregunta es... y sería la única pregunta... ¿Quién cree que puede hacer lo que haces mejor que tú mismo?
-Él único que hace lo que yo hago soy yo. Enseñarle a la gente a morir, eso lo hago yo. ¿No quieres ser yo?
-Probablemente podría ser tú, sí. Eso lo sé. Pero no quiero ser tú, Frank. No me interesa.
-Pesada es la corona. ¿Me entiendes?
¿Alguno de ustedes tiene fuego?
-¿Sabes de qué me di cuenta?
-¿Qué?
-El que no estuviera ahí, es el traidor.
-¿Y?
-Tú jamás has llegado tarde. Y... cuando te llamé... cometí un error.
Te di la dirección mal. Pero te apareciste en la correcta. ¿Dime por qué?
¡Dime por qué!
Eso es lo que pasa entre ratas, todos desconfían.
-¿No te interesa seguir siendo policía?
-No dije eso. Ser policía es mi trabajo. Quiero recuperar mi identidad.
La muerte es un arte. La vida es mucho más fácil.
Solo uno de nosotros es policía ahora Bill. ¿Entiendes?
¡Nadie sabe quien eres!
-Mátame. ¡Sólo mátame!
-Te estoy matando.
-Okey.