críticas chatarras

SCOTT PILGRIM VERSUS EL MUNDO
data: http://www.imdb.com/title/tt0446029

Anoten esta película y en cuanto aparezca por las pantallas o en el video, no duden en verla. Es una muy divertida comedia juvenil, vertiginosa, delirante, en varias capas visuales, con un elenco superlativo y muchos efectos especiales. Basada en el cómic del canadiense Bryan Lee O’Malley, “Scott Pilgrim…” es la historia de un romance contado como una serie de batallas de videojuegos.

Scott es un pibe perdedor que está tratando de recuperarse, a los tumbos, de un romance fallido. Por ahora, ennovia con una chica de 17 años (¡una colegiala!), Knives, una chinita linda y un poco pesada, mientras ensaya con su banda de rock. Pero todo cambia cuando conoce a Ramona, la mujer de sus sueños. Literalmente la mujer de sus sueños, porque la conoce en un sueño y luego la encuentra en la vida real.

Increíblemente, la chica le da bola, tras un par de intentos fallidos. Pero el problema es el pasado de Ramona. Se presenta la Alianza de los siete ex siniestros, (los “ex” de Ramona), complotados para desafiar a muerte a todo nuevo pretendiente que ose hacerla olvidar a Gideon, el último novio. Y cuando decimos desafiar a muerte, es desafiar a muerte. Batallas de videojuego, con espadas samurais, rayos, saltos en el aire, patadas voladoras, etc., etc., etc.

Redondeando: si Scott quiere ganarse a Ramona, deberá vencer a los fantasmas de los ex de la candidata, que están ahí, desde el pasado, para amargarle el presente. Casi como en la vida real, ¿no?



El guión de “Scott Pilgrim…” es puro vértigo, desde un diálogo intercalado por textos y flechas, pasando por flashbacks, dos finales diferentes, gags en cataratas. La sintaxis cinematográfica de “Scott Pilgrim...” replica la velocidad del videojuego. Pero no se queda en eso. Porque la historia que cuenta es la más vieja del mundo: un chico tratando de ganarse a una chica. Y detrás de todo el delirio visual, está esa verdad fundamental de quien aparece en la vida de alguien, debe lidiar (y aplastar, lo que es más importante) el pasado del otro. Siempre es un combate contra la historia, una lucha para imponerse y lograr que la otra parte diga: “me enamoré de este zonzo”.

Una última “lección” del filme: Scott no gana por el “Poder del amor”, sino por el “Poder del amor propio”. No alcanza con amar al otro, sino te amás primero a vos. Máxima capital para el que entrega el corazón en una lucha a muerte por el favor de una dama.



El elenco de “Scott Pilgrim...” es el otro punto fuerte, junto a los efectos especiales y el guión, con un Michael Cera (el pibe de “Juno”) que calza justo para el protagónico, una sugestiva Mary Elizabeth Winstead y muy buenos secundarios de los que destacamos a Kieran Culkin (el amigo gay de Scott) y Ellen Wong (Knives, la colegiala).

Escenas destacadas: los dos encuentros finales con Gideon; el encuentro con la ex de Scott; la batalla de rock con los gemelos.

Las mejores frases, mañana.