críticas chatarras

Nunca nos debemos preguntar: “Señor, ¿qué debo hacer?”. Porque el Señor nos ha dicho qué hacer. Amar al prójimo.

-¿Eres gay?
-No.
-Mi nieto es gay. Sé todo sobre ellos.

Cinco dólares.

-¿Adónde conociste a esta persona?
-En la Internet.
-Sí, ahora todos lo hacen.

-¿Ha habido algún cambio en la familia durante el último año?
-No, todo se ha mantenido prácticamente igual... Excepto que Karin está embarazada y Lars está loco.

Saben, esto no es necesariamente algo malo. Lo que llamamos enfermedad mental, no siempre es una enfermedad. Puede ser una forma de comunicación, puede ser una forma de resolver algo.

Bianca está aquí por alguna razón.



-Por el amor de Dios, ¿cuál es el problema? Sally, tu primo le ponía vestidos
a sus gatos. Hazel, tu sobrino le dio todo su dinero a un club de OVNIS. Y Ernie, todos sabemos que tu primera esposa era cleptómana.
-No era así.
-¿Entocnes por qué la enterraron con mis pendientes?

La pregunta es, como siempre... ¿qué haría Jesús?

-Gus y yo somos muy afortunados con las mujeres. Ella es maravillosa. Pero ella...
-No es necesario que hablemos. Busquemos algo para leer.
-No, es sólo que... que quede entre nosotros...
-Por supuesto.
-Ella me preocupa. Creo que tiene un problemita.
-Quizás no deberías contármelo.
-No, está bien. Es sólo... Creo que se debe a que ella es insegura pero... siempre está tratando de abrazar a alguien.

-¿Duele?
-Está bien. Está bien, puedo soportarlo.



Eres mi novia. No deberías tener horarios...

-¡Dios! Toda la gente de esta ciudad, está detrás de ella, para hacer sentir
a Bianca como en casa. ¿Por qué piensas que ella tiene tantos lugares adonde ir y tantas cosas por hacer?
-No lo sé.
-Por ti. Porque toda esta gente te ama. Empujamos su silla de ruedas, la llevamos al trabajo, la llevamos a su casa, la bañamos, la vestimos, la ayudamos, la acomodamos en la cama, la trasladamos. Y ella no es pequeña, Lars.
Bianca es una chica grande. Nada de esto es fácil para nosotros, pero lo hacemos. Lo hacemos por ti. Así que no te atrevas a decirme que no nos importa.

-Aún habrá un niño por dentro, pero tú maduras cuando decides hacer lo correcto, ¿sí? Y no lo correcto para ti. Lo correcto para todos. Aún cuando duele.
-¿Cómo qué?
-Como... tú sabes, como no molestar a la gente y no engañar a tu mujer... y cuidar a tu familia, sabes. Y admitir cuando te equivocas... O al menos lo intentas. Es todo lo que se me ocurre. Parece que es fácil pero por algún motivo no lo es. Lo sé. Porque nada es fácil. Es como nuestro viejo. No tenía que cuidar a dos niños él sólo... Podía habernos llevado a un orfanato, sabes, la gente hace eso. Pero nos amaba y trató de hacer lo correcto... Aunque no supiera cómo... Y a pesar de que tenía el corazón roto. No debí dejarte solo con él. Él estaba tan triste, que me asustaba... y yo sólo... yo sólo huí. Y eso fue egoísta. Y lo lamento.



Ella no se despierta.

-¿Cómo permitiste que sucediera esto?
-No, no permito que esto suceda. Sino Lars. Siempre ha sido Lars. Él está tomando las decisiones.

Nos reunimos y nos sentamos. Eso es lo que hace la gente cuando los golpea la tragedia. Se reúnen y se sientan.

¿Quieres dar un paseo?